Jarry y Podlipnik en el trabajado dobles que ganaron ante los argentinos (Foto: Secretaría de Deportes de San Juan) |
Tras una maratónica segunda jornada de partidos en el gimnasio Aldo Cantoni de San Juan, el equipo chileno de Copa Davis cayó 2-3 ante Argentina por la final de Zona I Americana.
En el primer turno, Nicolás Jarry y Hans Podlipnik pusieron arriba a Chile en la serie tras derrotar a Guido Pella y Máximo González por parciales 7-6(7) 5-7 3-6. En el primer set los nacionales tuvieron dificultad para encontrar su mejor tenis, especialmente Jarry que estuvo algo errático. Estuvieron sin quiebres, hasta el 6-6 del tie break. La dupla chilena tuvo dos set point que no logró capitalizar. Acto seguido, los locales si lo hicieron.
En la segunda manga, con un Jarry al alza, lograron quiebre en el cuarto game, pero a su vez Podlipnik tuvo dificultades con su servicio. A pesar de sufrir un quiebre de vuelta, lograron devolverlo en el duodécimo juego, con una volea impecable de HPod, y quedarse con el set.
En el tercer lapso y definitivo, tras el rompimiento en el sexto juego, Jarry y Podlipnik mantuvieron sus servicios para cerrar la faena y comenzar a pensar en los singles.
Jarry vs el cansancio
Podlipnik celebra uno de los mejores puntos del día durante el dobles (Foto: @CopaDavis) |
La cifra se repitió en el segundo (6-4), aunque el chileno quebró de entrada y en el cuarto game. Pero Schwartzman, con más piernas, logró recuperarlos e inclinar el match a su favor.
Garín con altibajos
En el match definitorio, Christian Garín no supo aprovechar las oportunidades que le ofreció un Guido Pella que traía encima el cansancio del dobles. Ni en el primer set (sexto juego), ni en el segundo (primer y segundo game) logró capitalizar los quiebres de servicio que logró. Su saque además tuvo muchos altibajos. La cuenta terminó a favor del argentino 6-3 7-6(3).
Rescatar la actitud de Garín y su derecho que fue un dolor de cabeza para su rival en varios pasajes del partido. Sumemos además que batalló hasta el último punto.
Se acaba así la ilusión de pelear un cupo en el Grupo Mundial por 2018, pero el futuro es muy prometedor para el equipo de Massú.