Copa Davis 1952, Austria-Chile: EL TRIUNFAL DEBUT COPERO DE LUIS AYALA, "UN PLAYER CON TRAZAS DE MAESTRO"

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La primera serie de Copa Davis entre Austria y Chile se disputó los días 2, 3 y 4 de mayo de 1952 en el Court Central del Prater Park Club de Viena con triunfo chileno por 4-1.

En el primer punto Ricardo Balbiers derrotó a Gustav Specht 6-0 6-2 6-3. La crónica de El Mercurio informó que el jugador nacional "no tuvo ninguna dificultad para lograr el punto inicial para Chile (...) Balbiers se mostró muy eficiente en su servicio, generalmente  muy potente y bien colocado. Su juego lo realizó principalmente desde la línea de base donde dominó completamente la cancha con sus lanzamientos laterales. El austriaco nada pudo hacer ante la potencialidad del jugador sudamericano, quien también momentáneamente se corrió muy exitosamente a la red. Allí era muy difícil pasar. El triunfo del chileno fue muy aplaudido por el público".

En el segundo partido hacía su debut copero Luis Ayala, quien venció a Alfred Huber por 7-5 12-10 7-5. La crónica de El Mercurio lo catalogó como "un player con trazas de maestro" que "a los 19 años derrotó al artista del tenis Alfred Hubner, de pelo rojo que juega con ambas manos, en un encuentro que se prolongó por dos horas".

Sobre el match, Ayala "tuvo que emplear todos sus recursos, juego de fondo, de red, rapidez en los desplazamientos y luego combinando con juego lento pero seguro a las líneas de base y laterales , para imponerse al humorista y temperamental jugador austriaco, cuyas pantomimas en el court causaron considerable diversión entre la gran muchedumbre (...) No obstante, la calma del jugador chileno permaneció inalterable pese a que el austriaco, actuando en su propio medio, se tiró al suelo  y se arrastraba en la cancha, doblaba los tobillos y lanzó al aire la raqueta en numerosas ocasiones".

Punto austriaco en el dobles

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En la siguiente jornada del dobles, la dupla de Ayala y Carlos Sanhueza cayó ante Huber y Hans Redl (jugador que contaba con un solo brazo) 6-2 5-7 2-6 4-6. En la reseña de El Mercurio señala que "los austriacos desplegaron comparativamente más fuerza y energía en un match que en realidad careció de jugadas espectaculares". Agrega que "Ayala se mostró algo limitado en su juego por la actuación de su compañero de equipo, Sanhueza, quien, sin embargo, salvó varias situaciones difíciles y logró puntos que en el momento eran vitales con sus poderosos servicios".

A ello hay que sumar que Huber "jugó con mayor seriedad y sin los aspavientos tipo clown de que hizo gala en su primera presentación. Huber se desempeñó con habilidad y maestría en los dobles".

Con todo, "los chilenos experimentaron una notable reacción en el segundo set, dando la sensación de que los campeones sudamericanos de dobles lograrían finalmente batir a sus hábiles rivales austriacos; pero Redl y Huber no se dejaron amilanar (...) Los chilenos tuvieron que apelar a la defensa y finalmente se vieron batidos".

"El último set -agrega El Mercurio- fue menos agitado ya que los austriacos llevaban uno de ventaja y los chilenos no deseaban arriesgar su chance en jugadas espectaculares. Ayala apoyó constantemente a Sanhueza que era literalmente bombardeado por Redl y Huber".

Balbiers asegura el triunfo

En la jornada final la serie fue asegurada por el equipo chileno con los triunfos de Balbiers sobre Huber 6-4 3-6 6-3 1-6 6-1, y de Ayala sobre Specht 6-1 6-2 6-1.

Sobre el primer encuentro, El Mercurio consignó: "Balbiers de inmediato tomó el control de las acciones, aún cuando Huber, jugando con más seriedad que en su encuentro anterior, ofreció resistencia desde un comienzo. No obstante, el juego del chileno se vio más sólido particularmente en el servicio y en la base. No fue un set brillante, sino más bien de observación, en el cual el visitante mostró mejores recursos".

El curso del match tendría un vuelco. "El revés del anterior fue el segundo set. Huber accionó rápidamente, y se corría a menudo a la red, desde donde lanzaba tiros cruzados sin respuesta. El tercer set, nuevamente mostró a un Balbiers jugando muy posesionado de su papel de hombre llave para la victoria de Chile. Sus tiros profundos y ajustados a las líneas laterales no permitieron ahora al austriaco a actuar cerca de la red. En el juego de base, el chileno se vio superior, lo cual le valió ganar este set".

"En el cuarto -continúa la crónica-, con el que el local empató a dos sets por lado, Huber se vio muy rápido y constante en sus voleas, al tiempo que se desplazaba velozmante en la cancha. Balbiers pareció estar guardando energías para el set final (...) Efectivamente, en el último y decisivo set, Balbiers jugó brillantemente, recibiendo aplausos de la concurrencia. Su adversario, que a cada instante en los sets anteriores aprovechaba cualquier debilidad del chileno, ahora no pudo hacer nada ante Balbiers, que con tiros largos y violentos mantuvo al austriaco durante toda esta jornada saltando y resbalándose sobre el court en su esfuerzo por alcanzar las pelotas que venían del campo contrario. El dominio de Balbiers en el último set fue casi absoluto, pese al enorme entusiasmo desplegado por el adversario".

Respecto al triunfo de Ayala en el quinto punto, "se mostró francamente superior con sus tiros rasantes y precisos dirigidos a la línea de fondo. Pese a su juventud, Ayala se mostró como un jugador de gran aplomo, que domina muy bien las diferentes modalidades del juego".