Copa Davis 2004, Chile-Japón: EL REGRESO AL GRUPO MUNDIAL DE LA MANO DE LOS CAMPEONES OLÍMPICOS

El equipo celebra el ascenso al Grupo Mundial tras derrotar a
los japoneses en el dobles

La única serie de Copa Davis disputada por Chile ante Japón es además un hito en la historia: el regreso al Grupo Mundial tras varios años en la Zona Americana. Aún fresco el recuerdo de las medallas olímpicas en Atenas, el paso lógico era ascender y se logró.

El Club Naval Las Salinas de Viña del Mar fue el escenario los días 24, 25 y 26 de septiembre de 2004 para enfrentar a los nipones con Fernando González, Nicolás Massú, Marcelo Ríos y Hermes Gamonal en el equipo.

Suzuki y Shimada en una de las jugadas
del dobles jugado en Viña del Mar (Foto:
Reuters)

Según la crónica de El Mercurio de Valparaíso, "el primer turno fue para Massú, que se dio un festín con Gouichi Motomura, derrotándolo por un triple 6-1 que perfectamente podría haber terminado con el japonés sin 'games' a su favor, de no ser por el sacrificio exhibido a lo largo de los 93 minutos de juego que duró la brega (...) Un pleito relajado, sin situaciones dramáticas, en el que el público se dedicó a observar el nutrido repertorio de golpes exhibido por el tenista local, que deleitó a las cinco mil personas que estuvieron en las graderías del court principal de Las Salinas. Al otro lado de la red, Motomura no pudo evitar una paliza previsible debido a su escasa adaptación a la arcilla y a las enormes diferencias de nivel que lo separaban del 'Vampiro'".

El segundo punto lo jugó González "cuya faena inicial -relataba El Mercurio de Valpo- parecía similar a la de su compañero de equipo. Sin embargo, ésta se fue complicando en la medida que Takao Suzuki lograba pararse mejor en la polvorienta cancha y jugar cada pelota como si fuera la última del partido. El registro de 6-4, 6-2 y 7-6 (7-1) fue el fiel reflejo de lo acontecido, con un "Bombardero" cuyas pelotas no parecían tener la misma agresividad de siempre, lo que permitió el ascenso natural del natural de Sapporo, que en la tercera manga defendió su servicio con pleno éxito llevando el compromiso a un inesperado "tie-break". En ese momento la segunda raqueta nacional borró las nubes que habían aparecido en el horizonte y demolió al oriental con cuatro mini quiebres para llevarse el desempate por 7-1".

Explosión de la hinchada tras triunfo en dobles

González y Massú aseguraron la serie
y el ascenso en el dobles (Foto:  Mercurio
Valpo)

"Cuando Nicolás Massú metió un profundo 'derecho' paralelo que dejó sin opción a Thomas Shimada, se derrumbaron todas las maldiciones que afectaron a este deporte en la Copa Davis durante los últimos 19 años. Una pelota que se clavó en la húmeda arcilla viñamarina dejando como marca el regreso de Chile al Grupo Mundial luego de una tormentosa ausencia". Así consignaba El Mercurio de Valpo ese último punto del dobles, a la postre tan significativo

La pareja campeona olímpica necesitó una hora y 43 minutos para vencer a los japoneses Shimada y Suzuki 6-3 6-3 6-1, rivales que se mostraron "empeñosos, luchadores, plásticos, pero de discreto nivel".

González y Massú, continúa la crónica, "nunca cedieron sus saques, sirvieron a más de 200 kilómetros por hora y demostraron la excelente complementación que han alcanzado como la pareja más importante del tenis chileno -en este certamen- después de Jaime Fillol y Patricio Cornejo, que disputaron la final de 1976 ante Italia. De poco sirvió el esfuerzo de Suzuki por servir de manera potente y atacar en la red, al otro lado estaba un sólido Massú que mostró categoría de 'top ten' al llevarle hasta ángulos insospechados las pesadas pelotas que se ocuparon en el court de Las Salinas. Inútil fue el esfuerzo de Shimada por ganar cada una de las bolas que venía en altura, porque desde el fondo González combinaba regularidad con fuerza".

Jornada de alegría contenida por años fue la consecuencia inmediata en el Club Las Salinas y el país tenístico.

Meme y Mano de Piedra pusieron el broche de oro

Hermes Gamonal le dio el 4-0 momentáneo
a Chile (Foto: Mercurio Valpo)

Con el triunfo y ascenso asegurado, Hermes Gamonal jugó el cuarto punto ante Takao Suzuki , ganando por parciales 7-5 2-6 6-2. El Meme volvía a la Davis luego de una complicada lesión.

El Mercurio de Valpo señaló sobre el match que "el tenista de Llolleo trató de ahorrase problemas moviendo al oriental de lado a lado, sin embargo, el asiático nuevamente mostró plasticidad y veloces reflejos para complicar al chileno, atacándolo en la red. A eso se sumaban sus fuertes saques y sorpresivas voleas desde cualquier punto de la cancha".

Agrega la crónica que "Gamonal fue más inteligente y mostró más categoría, al liquidar a Suzuki cuando las cosas se complicaban en exceso. Se llevó el set inicial en 63 minutos, por un ajustado 7-5, sellado en el penúltimo "game" con un quiebre a su favor. Luego perdió la segunda manga por 6-2, en 34 minutos, en lo que fue el primer capítulo que los nacionales cedían este año. Todo parecía derrumbarse, pero el aliento del capitán Sergio Elías resultó efectivo para Hermes, que conquistó el tercer lapso por un cómodo 6-2 en sólo media hora".

El broche de oro lo puso Fernando González. La nota del diario porteño relató que "el campeón olímpico de dobles en Atenas cumplió una relajada presentación para vencer por un doble 6-3 al japonés Gouichi Motomura, que cumplió con su promesa de ganar más de tres juegos, superando la exigua marca anotada frente a Nicolás Massú. El nipón, que luchó intensamente ante el bicampeón del ATP de Viña del Mar durante una hora y 23 minutos, poco pudo hacer para impedir el amplio dominio del chileno, que manejó como quiso al segundo singlista japonés, pese a que Fernando nunca se exigió en demasía".

Así se completaba un 2004 lleno de gloria y éxitos para el tenis chileno.